En primer lugar, debemos decidir que clase de similitud son las más importantes para nuestro propósito.Uno de los primeros sistemas de clasificación colocaba dentro de una misma categoría, a todos aquellos organismos que viven en un mismo hábitad. Por ejemplo, los peces, las ballenas, que habitan en el medio acuático, se clasificaron como seres nadadores. Las avez, los murciélagos y los insectos como seres vivos voladores.A medida que se tuvo mas conocimiento sobre la anatomía de los seres vivos, se pudo establecer que las semejanzas del hábitat y de órganos análogos, resultaban ser superficiales. El hecho de que los murciélagos tengan piel y amamanten a sus crías; que las aves tengan plumas y pongan huevos; que los insectos tengan un esqueleto externo y presenten un tipo de sagre incolora, sugiere que las diferencias superan en importancia a las semejanzas existentes entre estos organismo